- Castillo de Edimburgo
- La Milla Real (Royal Mile)
- Palacio de Holyroodhouse
- Calton Hill
- Catedral de St Giles
- Museo Nacional de Escocia
- Calle Victoria (Victoria Street)
- Cerramientos de Edimburgo (Edinburgh’s Closes)
- Galería Nacional de Escocia
- Real Jardín Botánico
Después de experimentar alojamiento, restaurantes y lugares turísticos en Liverpool, partí hacia Edimburgo. Durante mi viaje a Edimburgo, una ciudad llena de encanto e historia, tuve la oportunidad de explorar varios lugares emblemáticos y fascinantes. A continuación, te comparto mi experiencia en los 10 lugares imprescindibles que visité en Edimburgo:
1.Castillo de Edimburgo:
Al visitar este icónico símbolo de la ciudad, disfruté de unas vistas impresionantes de Edimburgo desde lo alto. Además, aprendí sobre la historia de Escocia a través de sus exposiciones y la Piedra del Destino.
Esta antigua fortaleza ha sido escenario de numerosas batallas y eventos históricos a lo largo de los siglos. Al recorrer sus murallas y salas, pude sentir la atmósfera única y la riqueza histórica que rodea el lugar. El Castillo también alberga las Joyas de la Corona Escocesa y la famosa Piedra del Destino, símbolo del poder real en Escocia.
2.Royal Mile:
Caminé por esta famosa calle que conecta el Castillo de Edimburgo con el Palacio de Holyroodhouse. A lo largo del recorrido, descubrí tiendas de recuerdos, pubs tradicionales y edificios históricos.
La Royal Mile es una mezcla vibrante de historia, cultura y vida cotidiana. Con cada paso, descubrí callejones estrechos llamados «closes» y «wynds», donde se esconden historias de fantasmas y leyendas locales. Me detuve en algunas de las numerosas tiendas de souvenirs para comprar recuerdos y disfrutar de un trago en un tradicional pub escocés.
3.Palacio de Holyroodhouse:
Al visitar la residencia oficial de la reina en Escocia, admiré las elegantes estancias y conocí la historia de la monarquía escocesa.
Este palacio ha sido el escenario de eventos históricos y escándalos reales, como la turbulenta vida de María, Reina de los Escoceses. Al recorrer las habitaciones decoradas con arte y muebles exquisitos, pude imaginar la vida de la realeza a lo largo de los siglos.
4.Catedral de St. Giles:
Me maravillé con la arquitectura y las impresionantes vidrieras de esta hermosa catedral gótica. También tuve la oportunidad de aprender sobre John Knox, líder de la Reforma escocesa.
Esta catedral, también conocida como la «High Kirk of Edinburgh», ha sido un centro espiritual y religioso en la ciudad desde el siglo XII. La capilla Thistle, donde se celebra la Orden del Cardo, es especialmente impresionante por sus detalles en madera tallada y las armaduras de los caballeros.
5.Arthur’s Seat:
Realicé una caminata hasta la cima de esta colina, que ofrece vistas panorámicas de la ciudad. Fue una experiencia revitalizante en plena naturaleza.
La leyenda cuenta que esta colina volcánica es el lugar donde el rey Arturo y sus caballeros solían reunirse. Al alcanzar la cima, no solo disfruté de las vistas panorámicas, sino que también me sumergí en la atmósfera mítica que rodea este lugar especial.
6.Calton Hill:
Desde esta colina, disfruté de otro punto de vista excepcional de Edimburgo. Además, pude ver varios monumentos históricos, como el Monumento Nacional y el Observatorio.
Con sus monumentos y edificios neoclásicos, Calton Hill es un recordatorio del apodo de Edimburgo como «la Atenas del Norte». Me encantó aprender sobre la historia detrás de cada monumento, como el Monumento Nacional, que conmemora a los soldados escoceses que murieron en las Guerras Napoleónicas.
7.Museo Nacional de Escocia:
En este museo, me sumergí en la historia, la cultura y la ciencia de Escocia. Me encantaron las exposiciones interactivas y la diversidad de temas abordados.
Este museo es el lugar perfecto para sumergirse en la historia de Escocia desde la prehistoria hasta la actualidad. Fue emocionante ver el artefacto más antiguo de Escocia, la piedra de Torrs, así como descubrir la historia de los guerreros pictos y los valientes jacobitas.
8.Monumento a Scott:
Este imponente monumento dedicado al escritor Sir Walter Scott me impresionó por su arquitectura gótica. Decidí subir sus escaleras para disfrutar de una vista única de la ciudad.
Construido en honor al famoso escritor Sir Walter Scott, este monumento gótico es una prueba del amor de Edimburgo por la literatura. Subiendo sus estrechas escaleras, me sentí inspirado por la figura de Scott y el impacto duradero de su obra en la cultura escocesa.
9.Princes Street Gardens:
Me relajé en estos hermosos jardines situados en pleno centro de Edimburgo, un oasis de paz perfecto para descansar después de un día de turismo.
Estos jardines son un remanso de paz en medio del bullicio de la ciudad. Me encantó descubrir las esculturas y monumentos esparcidos por el parque, como el Reloj Floral y el Monumento a los Soldados de la Primera Guerra Mundial. Pasear por los senderos y disfrutar de la belleza natural de los jardines fue una forma perfecta de relajarme y tomar un respiro de la vida urbana.
10.Real Jardín Botánico:
Finalmente, visité este enorme jardín botánico, donde disfruté de la naturaleza y descubrí una gran variedad de plantas de todo el mundo.
El Real Jardín Botánico de Edimburgo es un impresionante oasis verde en la ciudad que abarca 70 acres de terreno y contiene más de 13,000 especies de plantas diferentes. Durante mi visita, me maravillé con la diversidad y belleza de las plantas y flores, desde las exóticas orquídeas y cactus hasta los majestuosos árboles centenarios.
Uno de los aspectos más destacados de mi visita fue el invernadero victoriano, que alberga una impresionante colección de plantas tropicales y subtropicales en un entorno cálido y húmedo. Me encantó pasear por los diferentes ambientes dentro del invernadero y aprender sobre las plantas raras y en peligro de extinción que se conservan aquí.
Edimburgo es una ciudad fascinante y rica en historia, con una gran cantidad de lugares de interés para todos los gustos. Sus principales atractivos incluyen la impresionante arquitectura del Castillo de Edimburgo y la Catedral de St. Giles, el encanto y la historia de la Royal Mile, y la oportunidad de sumergirse en la vida de la ciudad en el Grassmarket y Victoria Street. Además, no se puede perder la belleza natural de Arthur’s Seat y los Princes Street Gardens, así como la tranquilidad que ofrece Dean Village.
Si visitas Edimburgo, te recomiendo encarecidamente que no te pierdas el Castillo de Edimburgo, la Royal Mile y la Catedral de St. Giles, que son algunos de los lugares más emblemáticos y representativos de la ciudad. También te animo a explorar lugares menos conocidos como Dean Village y Calton Hill, para disfrutar de una experiencia más auténtica y completa de esta increíble ciudad.
